El futbolista portugués no es sólo uno de los mejores jugadores del mundo, también es uno de los mejor vestidos en toda gala o evento en el que participe.
Su estilo se ha ido matizando con los años. No ha cambiado su forma de entender la moda, pero sí la ha refinado.
Su estilo siempre ha estado marcado por la idea del superatleta , todo me queda bien y cuanto más mejor.
Sin abandonar totalmente esta idea, su idilio con los diseñadores de DSQUARED2 le ha aportado un gusto y refinamiento del que antes carecía.
No ha perdido un ápice de su personalidad, pero ha conseguido un punto de equilibrio que le aporta madurez y saber estar.
Su porte es innegociable y ahora su estilo también.
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